Proyectos de energía nuclear recibirán impulso con visita de Putin
ABN (Aurelio Gil Beroes).- Las recientes declaraciones del presidente Chávez ratificando el interés de Venezuela de impulsar el uso de la energía nuclear con fines pacíficos, y la próxima visita al país del primer ministro ruso, Vladimir Putin, anunciada por el propio jefe de Estado, confirman la firmeza de ese propósito.
A mediados de noviembre de 2007, el presidente Chávez hizo una de sus primeras menciones al tema de la energía nuclear y de la importancia de su empleo con fines pacíficos.
Desde entonces, ocasionalmente se ha referido al tema, señalando las ventajas del uso de ese tipo de energía.
La última referencia la hizo el domingo 21 de febrero de este año, en el programa Aló, Presidente, cuando reiteró que su Gobierno tiene planes para desarrollar energía nuclear a pesar de las críticas de Estados Unidos.
El mandatario señaló que el desarrollo de la energía nuclear es necesario ante la crisis de energía eléctrica que vive el país, por la prolongada sequía.
“Nosotros vamos a desarrollar nuestra energía nuclear, como la tienen ellos desarrollada (Estados Unidos) y Europa, Rusia, China y Brasil y Argentina”, dijo.
Los “yanquis van a decir que Venezuela va a hacer la bomba atómica. Que digan lo que les de la gana; nosotros vamos desarrollar nuestra energía nuclear”.
Apoyo de Rusia
El presidente venezolano alcanzó acuerdos con Rusia para la materialización de su iniciativa nuclear durante la visita que efectuara a ese país en septiembre de 2009.
En esta ocasión, con la visita del premier ruso, se espera la definición de convenios y proyectos en esta materia.
Especialmente en proyectos de generación de energía eléctrica, lo cual permitirá superar la dependencia del país a la producida por los sistemas hidráulicos.
Viejo modelo
Como se sabe, los planes hidroeléctricos establecidos por los gobiernos de la Cuarta República, tuvieron como eje el sobre aprovechamiento del caudal del río Caroní.
Sobre este cauce, hoy menguado por la severa sequía producto del fenómeno climático “El Niño”, ha descansado la generación del 70 por ciento de la electricidad que actualmente consume el país.
El viejo modelo definido por los gobiernos del Pacto de Punto Fijo, no sólo concentró en esa fuente la generación de energía del país, sino que abasteció casi exclusivamente al eje norte-costero.
Se aplicó este esquema en correspondencia con la exigencia energética estadounidense de no emplear derivados del petróleo para la generación de electricidad y garantizar así el suministro al coloso del norte.
Reiniciar el camino
Con los nuevos emprendimientos, Venezuela retomará el camino que hace casi medio siglo la condujo a la vanguardia del desarrollo científico en Latinoamérica.
Efectivamente, en 1960, en nuestro país fue inaugurado el Reactor Nuclear Experimental RV1 del Instituto Venezolano de Investigaciones Científicas (IVIC), por iniciativa del científico venezolano, Humberto Fernández Morán, cuando el actual IVIC se denominaba Instituto Venezolano de Investigaciones Neurológicas y Cerebrales (IVNIC)
Esta usina fue la primera de su tipo en Latinoamérica, y marcó un hito en el desarrollo científico regional.
Tuvo un papel pionero en el desarrollo científico y tecnológico de la microscopia electrónica, y en estudios estructurales fisiológicos del cerebro.
A comienzos de la presente década, el reactor nuclear el RV-1 fue transformado –reversiblemente- en una planta de irradiación de rayos Gamma (PEGAMMA), a través de la cual el IVIC, presta con acierto servicios de esterilización microbiológica de alimentos, materiales quirúrgicos y otros.
Así se inició la experiencia venezolana en el manejo de este tipo de energía que, en un futuro próximo, será potenciada por los acuerdos establecidos por el Gobierno venezolano, con Rusia y otros países.
Aplicaciones
El presidente Chávez ha repetido que el uso que se le dará a la energía nuclear en Venezuela será con fines pacíficos.
El 2 de marzo de 2009, con motivo de la visita al país del presidente de la Organización Internacional de Energía Atómica (OIEA), Mohammed El Baradei, el presidente Chávez dijo: ”Estamos muy interesados en que se conozca lo que estamos haciendo, no vayan a decir mañana que estamos construyendo una bomba atómica en Latinoamérica”.
El empleo de esta energía es muy amplio pero, entre muchos, destaca su potencial para la generación de electricidad, ya que de acuerdo con especialistas, un kilogramo de uranio produce tanta electricidad como 17 toneladas de carbón.
En la agricultura, entre centenares de otras aplicaciones, facilita la investigación de la fertilidad de los suelos o el mejoramiento genético de plantas y animales.
En medicina es empleada en las área del diagnóstico y la terapia de numerosas enfermedades degenerativas y el cáncer.
También es utilizada en la alimentación, porque permite la conservación por mucho más tiempo de los productos orgánicos, inhibiendo la proliferación de hongos y bacterias, mientras que en la protección del medio ambiente facilita la detección y análisis de nuevos contaminantes.
Además, ofrece una ventaja adicional, y es que está libre de carbono, lo que significa que no contribuye con la emisión de gases de efecto invernadero que dañan la capa de ozono.
La energía nuclear en Latinoamérica
Actualmente, sólo tres países en Latinoamérica tienen importantes avances en el uso de la energía atómica y son México, Brasil y Argentina.
México tiene dos reactores en funcionamiento y ambos pertenecen a la central de Laguna Verde. El primero de ellos está operando desde 1990 y el segundo desde 1995.
Brasil posee tres usinas con sendos reactores: Angra I, Angra II y Angra III y está integrado con Argentina en la Agencia Argentino-Brasileña de Aplicaciones de la Energía Nuclear (AABAEN).
Argentina, por su parte, también tiene tres centrales: Embalse, Atucha I, Atucha II, construidas en los últimos cuarenta años y una cuarta en proyecto.
De acuerdo con el sitio Web: “Nuclear Power in the world Today”, en la actualidad en el mundo funcionan 442 centrales nucleares o reactores nucleares, diseminados en 31 países.
Razones para su uso
Son tres las razones que más pesan en las decisiones que conducen al uso de energía atómica o nuclear.
Primero, el crecimiento demográfico en el mundo, que demanda combustibles más baratos para producir la energía eléctrica para millones de habitantes.
Segundo, la esperanza de una mejor calidad de vida para todos estos seres humanos, a través de los beneficios de la electricidad.
Y en tercer lugar, la protección del ambiente, en momentos cuando de todos los rincones del mundo se demanda el cese de la producción de dióxido de carbono, resultante de la quema de combustibles fósiles, como lo son el petróleo y sus derivados.
La producción de electricidad en el mundo
Nuclear Power in the World Today informa que en el año 2006, los elementos utilizados para producir electricidad en el mundo, eran los siguientes y en esas proporciones:
Carbón 39%; agua 19%; energía atómica 16%; gas 15%; petróleo 10%, y otros 1%.