LA CONCIENCIA IMPERIAL
Por: José A. Rangel A
Los dueños del mundo, en su necesidad de preservar el sistema mundial capitalista bajo la égida del imperialismo, han desarrollado en su más reciente experiencia de guerra en Irak, un sistema más eficaz de destrucción a la población opositora o no a su sistema, que no consiste en armas de fuego, ni nucleares, ni químicas, sino utilizando las ideas. No quiere decir esto que sus armas anteriores no estén en su arsenal.
Para que el imperialismo coloque las armas tradicionales de guerra a un segundo plano y utilice las ideas, significa que superó su fase monopólica, para entrar a la fase de la Conciencia Imperial. El imperialismo llega a su fase de Conciencia Imperial, tras comprender que su poder va rumbo a la extinción y con él su sistema.
Hay que recalcar, que en esta nueva fase el imperialismo tiene muy precisado a su enemigo principal. Es lo Humano de la humanidad, que habita en cada uno de sus individuos. Recuerden Vietnam, como un solo ejemplo. Lo Humano que no se destruye con armas y que sí lo puede hacer con ideas que afecten su conciencia interna. Como el biólogo que usa el veneno de una serpiente para combatir su veneno.
La Conciencia Imperial se extiende ahora por las diversas ramificaciones de sus sistemas y subsistemas de las sociedades del mundo. Es capaz de trasladar en tiempo real y a cada minuto, información de cualquier parte del mundo, de cualquier país, comunidad, organización y producir la contradicción en la conciencia, como un virus dentro de un aparato electrónico. De esta manera pone a disentir lo humano de los humano.
Esto es más que una manipulación mediática, pero la utiliza. Esto es más que simples aparatos de inteligencia trabajando, que sí los hay. Esto es más que una simple manipulación sicológica, que la hay. Esto es mucho mayor que una instrumentación subliminal, ya que en su origen, el formulador de la contradicción es una conciencia imperial despierta. Casi omnisciente. Y al alcanzar esta fase, todo lo puede utilizar con mayor exactitud y acierto. Para esto, debe tener el equipo y los equipos adecuados. Y además, ahora conducido por el militarismo de ese país.
No podemos enfrentar esta nueva etapa del imperio con palos y tuercas. Las teorías que usamos están totalmente cuantificadas en sus posibles resultados. Estamos frente a un enemigo de más calibre del que podamos imaginar. La bestia se hace más peligrosa cuando está herida.
Coincidencia o no, Fidel Castro sabiamente optó por el trabajo de las ideas. No es lucha ideológica, sino trabajo de conciencia, lucha por y para la conciencia. Así se puede enfrentar al imperio dentro del imperio mismo y sus manifestaciones en los diversos países. La lucha se centra principalmente en fortalecer o destruir la conciencia humana.
La visión clásica de crear teorías, de crear ideas para una buena polémica son sueños del pasado, es una ilusión más del dogma que adormece la conciencia humana. Tampoco nos ayuda esa época en que clasificábamos las ideas en contrarias y de colores distintos a los gustos de un razonamiento lógico aceptable. Eso conduce a más sueño de la conciencia. Podremos utilizar todo eso, pero desde la conciencia despierta. Y cuando lo hagamos veremos su inutilidad.
Se hace necesario un Equipo de Creación de Ideas Finitas, que respondan a una práctica inmediata, que a su vez, puedan ser superadas por otras al ritmo más vertiginoso que la realidad. Que tenga la capacidad de conciencia para desmontar la contradicción de conciencia generada por el enemigo y de responder con igual y mayor calibre.
Teorías efímeras, pero eficaces, que permitan no sólo impulsar la realidad, sino despertar la conciencia de los individuos, que es la revolución más importante. Lo que permitiría el cañoneo incesante al imperio despistándolo, desenmascararlo e impulsando a su vez la Revolución Bolivariana.
La creación de semejante Equipo de Creación de Ideas Efímeras, para darle un nombre, podrá estudiar y responder a diario a la arremetida de la Conciencia Imperial, haciéndolo desde la Conciencia. La creación de un equipo así, sólo podría ser creado por el jefe de estado y tendrá, además de todos los recursos, el basamento de la Conciencia Protagónica.
José A. Rangel A.
(25juni08)
jarach16@hotmail.com