LA TENACIDAD Y EL IMPULSO
Evocación de la II República y llamamiento para la III República
Antonio Maira

inSurGente.- “(…)Vivimos en un sistema oligárquico que ha integrado a los grandes empresarios con las élites políticas, profesionales, informativas, educativas, intelectuales en general, en un sistema de dominación que refleja las relaciones de poder capitalista. (…)Pues bien, frente a la corrupción, frente a un proceso de concentración del poder que ha alcanzado los últimos objetivos: bipartidismo; proceso de desaparición de IU, hay que plantear la necesidad de un acto fundacional. Desde abajo, desde las mayorías, la III República. (…)No se trata únicamente de cambiar la forma de estado, se trata de exigir, de provocar, contra todo el sistema político vigente –contra todos sus agentes: políticos, sindicales, sociales, mediáticos, intelectuales- un proceso constituyente(…)”.

1.- Como saben ustedes este diario digital inSurGente es heredero del quincenal, también digital, Cádiz Rebelde que fue fundado y colocado en la red en la primavera del año 2000.

2.- Llevamos pues, ocho años, lanzando gritos y piedras desde una trinchera particular de la luchas de clases.

Es la trinchera informativa y nuestro enemigo es Falsimedia –el conjunto orgánico, estructurado, de los grandes medios de comunicación, o de los medios institucionalizados-. Falsimedia es el poder no contabilizado del estado, o el poder enmascarado. Su función prioritaria es la fabricación de opinión pública, y la fabricación también de emoción pública, un componente muy importante de la manipulación de los ciudadanos y ciudadanas.

Hemos estado mucho tiempo dando por sentado que los medios de comunicación –en su conjunto- daban cobertura al derecho de información y de expresión de la opinión. Nada más ajeno a la realidad. Nada más falso que eso.

Como sabéis hace un par de semanas –en un ámbito en el que el papel político: ideológico pero no sólo ideológico, de los medios, ha tenido una presencia más evidente-, en América Latina, se ha realizado un congreso continental contra el “terrorismo mediático”, el Encuentro Latinoamericano contra el Terrorismo Mediático.

“Ya no se discute más –dice Beto Almeida, un periodista brasileño- si existe o no el terrorismo mediático. Después que la humanidad comprobó, espantosamente, hasta donde pueden llegar los poderosos conglomerados privados mediáticos, cuando han creado un clima de terror en la opinión pública mundial, a partir de la falsa noticia de que habían armas de destrucción masivas en Irak, para justificar la ocupación y destrucción criminales de aquél país, haciendo correr allí tanta sangre en la misma proporción de la cantidad de petróleo que rapiñan, ya no hay más dudas; ya se pueden esperar las acciones más inescrupulosas y sanguinarias de los que practican el terrorismo mediático.

Esta degeneración comunicacional es parte de la naturaleza misma de los medios de comunicación organizados en forma de oligopólios y cada vez más como reflejo de la inevitable concentración del sistema capitalista. O sea, no es posible creer en alguna posibilidad de civilidad, de corrección o de humanización de ese sistema comunicacional prisionero de la lógica del mercado cartelizado en una fase imperialista del sistema capitalista, cuya esfera de actividad más dinámica y lucrativa es la industria bélica. La vinculación y fusión cada vez mas profundizada de los medios de comunicación con esta industria bélica se comprueba con el control ejercido por los anunciantes sobre los medios; anunciantes que en su mayoría son empresas transnacionales desde siempre involucradas en las acciones de desestabilización de gobiernos democráticos y progresistas en todas partes.”
La declaración final del encuentro no ofrece lugar a dudas:

“El terrorismo mediático es la primera expresión y condición necesaria del terrorismo militar y económico que el Norte industrializado emplea para imponer a la Humanidad su hegemonía imperial y su dominio neocolonial. Como tal, es enemigo de la libertad, de la democracia y de la sociedad abierta y debe ser considerado como la peste de la cultura contemporánea.

La información no es una mercancía. Tal como la salud y la educación, la información es un derecho fundamental de los pueblos y debe ser objeto de políticas públicas permanentes.

No sólo la SIP, sino grupos de choque como Reporteros sin Fronteras, responden a los dictados de Washington en la falsificación de la realidad y la difamación globalizada. En este contexto, la Unión Europea cumple un rol vergonzoso que contradice la heroica lucha de sus pueblos contra el nazi-fascismo”.

Recordar el eco mediático unánime que tuvo, aquí en España, el infame ¿Por qué no te callas? que el Borbón de turno, espetó al presidente de Venezuela, Hugo Chávez.

Como medio alternativo, en este campo fundamental de la lucha social que es la información, tenemos varios criterios fundamentales que responden a aspectos fundamentales de la realidad, y a grandes alineamientos políticos:

* Uno de ellos es el antiimperialismo.

Frente al proyecto imperial, militarista, genocida y violatorio del derecho internacional, que intenta realizar el llamado: Gran siglo Americano, y que se ha manifestado sin trabas y sin máscaras en los últimos años, defendemos la soberanía de los pueblos, la resistencia antiimperialista.
Es la perspectiva global, necesaria para entender nuestro escenario político más reducido.

*El segundo es el anticapitalismo.

También después de la caída de la Unión Soviética, han desaparecido los ropajes y las máscaras de un sistema económico que realizando su esencia explotadora, margina y hambrea a cientos de millones de seres humanos, explota en condiciones extremas a miles de millones, condena como “inútiles” a continentes enteros, hace crecer una desigualdad mucho más que escandalosa, y es capaz de alterar hasta poner en riesgo las condiciones de vida en el planeta.

*En el ámbito de nuestro estado nuestro criterio político fundamental es el republicanismo.

Se trata de promover, como objetivo político concreto e inmediato, la III República socialista y popular.
No es tan solo una evocación histórica de nuestra II República, una reivindicación que se levante contra tantas décadas (77 años) de olvido, de humillación y de desprecio, sino una propuesta política concreta e inmediata ¿Por qué?

3.- ¿Por qué?

Pensamos que por primera vez después de tantos años (o por segunda vez si tenemos en cuenta la demanda republicana de una recuperación inmediata de la legitimidad democrática violentada por el golpe fascista de 1936, rápidamente frustrada y traicionada por la transición,) la República aparece como exigencia necesaria.

No se trata únicamente de cambiar la forma de estado, se trata de exigir, de provocar, contra todo el sistema político vigente –contra todos sus agentes: políticos, sindicales, sociales, mediáticos, intelectuales- un proceso constituyente.

Una “ruptura democrática” si queremos usar el lenguaje político de los años 70 del siglo pasado.

¿Por qué es una exigencia necesaria?

La respuesta se llama corrupción. Corrupción extrema del sistema vigente.

-En primer lugar “corrupción política” o “corrupción de la democracia”.

No hay ni el menor residuo democrático –de representación ni de participación popular- en nuestro sistema político.

El sistema realiza a plenitud –a entera satisfacción de sus diseñadores locales y de sus censores globales- el llamado Consenso de Washington, es decir, la simulación de procesos electorales abiertos, en una sociedad regida y estructurada por el capitalismo.

En realidad lo que tenemos aquí es una mercocracia, en la que el Dios Mercado lo rige todo, también el funcionamiento del sistema político.
La ausencia de democracia es muy visible en el sistema electoral y en el sistema político global, pero también en el sistema mediático, en los procesos de “fabricación de la opinión pública”.

Echemos un vistazo a algunos de los elementos del sistema:

-Procesos internos de selección de candidatos. Estructura totalmente oligárquica de los partidos políticos.

-Dinero convertido en el instrumento que hace posible, o no, la llamada “competencia política democrática”.

-Inexistencia de programas electorales.

Se ha roto todo vínculo entre elegidos y electores. No existe “mandato democrático alguno”, ni ningún mecanismo de control o de revocación de los elegidos.

La primera ruptura clamorosa del “mandato electoral” la realizó el PSOE al romper su compromiso de salir de la OTAN con el que ganó las elecciones de 1982.

-Bipartidismo con identidad básica de las dos organizaciones políticas.

El “Sistema de mercado”, el capitalismo con predominio empresarial (competitividad como criterio básico de la eficacia del sistema) es la estructura económica indiscutible.

En las últimas elecciones, y ante las perspectivas de crisis los empresarios optaron por Zapatero y no por Rajoy.

-Relegación de todo el sistema de derechos enunciados en la constitución a declaraciones formales, en un sistema en el que es el Mercado el que distribuye la “renta social”, o incluso los mecanismos fundamentales de integración (el trabajo, por ejemplo).

-El “estado de bienestar” ha quedado relegado por el “conservadurismo compasivo” –la versión contemporánea de la caridad cristiana- que simplemente corrige los peores efectos de la desigualdad social y de la marginación económica.

Un “criterio moral” de los neocoms estadounidenses –una burla cargada de crueldad y de hipocresía- para aliviar los desastres sociales utilizado aquí fundamentalmente por Zapatero.

-Corrupción económica.

*Vivimos en el país del ladrillo.

La II República abordó el problema de la propiedad de la tierra, del latifundio y del campesino o del trabajador agrario sin tierra: de los jornaleros andaluces, extremeños. La reforma agraria fue uno de los ejes sobre los que basculó la política republicana.

En nuestra época la recalificación del suelo, la venta de suelo público, ha reforzado a una nueva clase social vinculada a la obtención especulativa de una nueva renta de la tierra. Una nueva clase social vinculada a los procesos de urbanización, a la especulación urbanística.

*Vivimos en el país del ladrillo y en el paraíso de los empresarios.

La competitividad es el criterio rector de las relaciones laborales, la marca del predominio de los empresarios, de subordinación absoluta de los trabajadores.

-Corrupción institucional.

Legislativo dependiente del Ejecutivo.
Judicial de carácter partidista.
Sistema municipal corrupto.

La corrupción es la substancia del sistema político.

Aquí hay que hacer una referencia al sistema informativo y también al sistema sindical.

Vivimos en un sistema oligárquico que ha integrado a los grandes empresarios con las élites políticas, profesionales, informativas, educativas, intelectuales en general, en un sistema de poder que refleja las relaciones de poder capitalista.

Pues bien, frente a la corrupción, frente a un proceso de concentración del poder que ha alcanzado los últimos objetivos: bipartidismo; proceso de desaparición de IU, hay que plantear la necesidad de un proceso constituyente. Desde abajo, desde las mayorías, la III República.

4.- ¿Cuál es el factor desencadenante?

Lo es la crisis económica.

-Crisis económica de la que no se han atrevido a hablar los candidatos durante la larguísima campaña electoral que empezó a primeros del mes de septiembre de 2007 con tres artículos a doble o triple página que publicó el país con una entrevista a Zapatero.
Ya habían saltado las alarmas. Fue allá por el 20 de agosto cuando la Reserva Federal inyectó varias decenas de miles de dólares en el sistema para impedir la quiebra del sistema financiero en EEUU.

La crisis de las hipotecas de alto riesgo era en realidad una crisis financiera global, es decir, el pinchazo de un globo que ha multiplicado cientos de veces la economía real.

No se trata del desajuste de algunos “productos” del mercado financiero.

Hay que tener en cuenta que la crisis estalla con un déficit gigantesco en la balanza comercial, y en el presupuesto público de los EEUU provocado, entre otras cosas, por el gigantesco gasto militar de la guerra de iraq (la guerra de los tres billones).
Es una derrota estratégica –no aceptada además- la que está en el origen de la crisis.

En nuestro país Zapatero organizará –con eficacia tecnocrática y buen talante- la represión económica y social de los trabajadores. Los sindicatos proporcionarán la ideología del “compromiso” y del “cinturón apretado”. La sufrirán todos los trabajadores, especialmente de los más jóvenes, muy intensamente las mujeres. Para los inmigrantes será la explotación salvaje o la expulsión.

5.- ¿Cómo llegará la República?

Que nadie piense en planteamientos de reforma constitucional en el marco del sistema.
El sistema, simplemente, no vale.

Tampoco valen las organizaciones políticas, sindicales, no gubernamentales, vinculadas a él.

6.- Entonces, compañeros y compañeras, amigas y amigos, esa República que hasta ahora llevábamos en el corazón, se plantea como un reto de lo posible, de lo necesario, de lo urgente, de lo humanitario, frente a la resistencia del sistema.

Lo tenemos todo: evocación, derrumbe del sistema monárquico de la transición, demanda de una respuesta solidaria ante la crisis, exigencia de un nuevo sistema económico, para empezar en serio:

-Tenemos una gigantesca deuda con aquellos hombres y aquellas mujeres, asesinados en el terrible verano del 36, asesinados los años posteriores, y silenciados y aterrorizados durante mucho más de cuarenta años, después.

Tenemos, sobre todo, sus aspiraciones de igualdad y de fraternidad humanas, que les costaron la vida y el silencio.
Es nuestra referencia histórica, fundamental, que necesitan los pueblos cuando intentan desarrollar un proyecto colectivo, fraternal y solidario.

-Tenemos el terrible fracaso de una transición política que nos ha conducido a la configuración perfecta de un sistema oligárquico. Un sistema que ha construido una nueva clase obrera la de los “subtrabajadores jóvenes”.

-Tenemos por fin, que proponer una salida popular a la crisis económica que va a acumular el sufrimiento y el desconcierto de nuestros trabajadores, especialmente las mujeres y los jóvenes.

Sólo falta –¿o no?- el impulso y la tenacidad

¡Viva la III República!

Este texto fue el pregón de la Caracolá republicana de Córdoba en la tarde de ayer, 13 de abril de 2008.